La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), ante la campaña y convocatorias electorales en España, quiere recordar la importancia del respeto más absoluto al trabajo de los periodistas y la imperiosa necesidad de preservar la independencia de los profesionales y de los medios de comunicación en estos procesos claves en cualquier sociedad democrática.
La FAPE lamenta una vez más y muestra su total rechazo a las cortapisas que impone la Ley Orgánica de Régimen Electoral General (LOREG) a este ejercicio profesional de los periodistas, al imponer los bloques electorales minutados. Estos bloques constituyen un más que evidente atropello a la libertad de prensa y al derecho a comunicar y recibir información libre y veraz durante el desarrollo de las campañas electorales. Esta normativa atenta contra el sentido común y los intereses generales de los votantes.
Por otra parte, lamentamos la postura de los partidos políticos mayoritarios responsables de las reformas de la citada Ley Orgánica que impone la cobertura informativa proporcional en los medios públicos, despreciando así al resto de formaciones y especialmente a los partidos extraparlamentarios. Y se condiciona el trabajo de los medios de comunicación y de los profesionales para decidir qué es noticia y qué tratamiento informativo debe darse a cada noticia en el desarrollo de las campañas electorales.
Del mismo modo, la FAPE demanda en aras del interés general de los ciudadanos convocados a las urnas, para que puedan acceder a contenidos informativos libres e independientes, que los partidos políticos respeten el criterio de los periodistas a la hora de realizar su trabajo. Por ello, es conveniente que abandonen la manida práctica de las declaraciones enlatadas. Y que permitan el acceso libre, y sin restricción alguna, a los actos de campaña permitiéndoles realizar una cobertura completa y libre.
La FAPE pide también que se rechacen las convocatorias de ruedas de prensa sin preguntas o la negativa de los líderes políticos a conceder entrevistas y debates. En este sentido, se debe animar a las empresas y medios de comunicación a no cubrir los actos de los partidos políticos que no destierren estas prácticas.
Reiteramos, pues, la petición realizada a los partidos políticos españoles para que garanticen de hecho y de derecho el pluralismo y la neutralidad informativa en los medios de comunicación, tanto de titularidad pública como privada.